El Vicentillo desnuda a El Chapo
Después de una pausa de dos semanas, por las fiestas decembrinas, se reanudó el llamado “juicio del siglo” contra Joaquín Guzmán Loera, El Chapo, en la Corte Federal del Distrito Este de Nueva York.
Ahora fue el turno de Vicente Zambada Niebla, El Vicentillo, hijo de Ismael El Mayo Zambada, quien testificó el jueves contra quien fue uno de los mejores amigos y socio de su padre.
El Vicentillo fue el coordinador logístico del Cártel de Sinaloa para importar a México droga procedente de Centro y Sudamérica, para luego trasladarla a Estados Unidos; para lograrlo utilizaba barcos, aviones, submarinos, trenes, camiones y automóviles.
En su primer día de declaraciones, El Vicentillo habló de cómo su padre inició los negocios con El Chapo y de la primera fuga de su “compadre” del penal federal de máxima seguridad de Puente Grande, Jalisco, en 2001. De acuerdo con Zambada, es falso que Guzmán Loera haya sobornado al entonces presidente Vicente Fox para dejarlo escapar, y confirmó la versión oficial, que indica que el capo huyó dentro de un carrito de lavandería.
Según su relato, El Chapo le contó que el encargado de la lavandería del presidio, apodado Chito, lo escondió debajo de una carga de sábanas y mantas sucias para conseguir que escapara. En un momento, Chito dejó suelto el carrito para hablar con un policía y El Chapo le dijo que el carrito se cayó hacia atrás y tuvo miedo, según contó entre risas, por lo que podría haber ocurrido si la ropa se hubiera volcado con él dentro.
También habló de la fuerte amistad entre su padre y El Chapo. Sin embargo, las declaraciones de Vicente Zambada Niebla no sólo ponen contra las cuerdas al propio Guzmán, sino también a la Administración para el Control de las Drogas, la DEA, ya que aseguró que realizaba el tráfico de droga en colaboración con esa organización, a cambio de información.
Es por eso que los fiscales interpusieron una solicitud ante el juez Brian Cogan para que los abogados de Guzmán Loera no pudieran cuestionar a El Vicentillo sobre su supuesto papel como informante de la DEA. Es evidente que las autoridades estadounidenses no quieren poner ante los ojos de la opinión publica nada que tenga que ver con autoridades o ciudadanos de ese país. No hemos escuchado a lo largo de este juicio a ningún socio o distribuidor de droga que sea estadounidense.
Las declaraciones de El Vicentillo ante la Corte indican que El Chapo tuvo contactos con la DEA desde 2007; conexiones que después él mismo encontró beneficiosas cuando quiso alejarse del liderazgo del cártel.
Según El Vicentillo, intentó dejar el negocio antes de su arresto, en 2009, para lo cual organizó una reunión con su padre, El Mayo, y con El Chapo, quien le ofreció facilitarle su contacto con la DEA. Según su relato, la agencia buscaba su colaboración, y sólo la de él.
En otro episodio de la vida de El Chapo, El Vicentillo señaló ante el juez Brian Cogan que tras la captura de Arturo Guzmán Loera, El Pollo, hermano de El Chapo, en agosto de 2001, en la Ciudad de México, el líder del Cártel de Sinaloa ideó un plan para que su hermano pudiera fugarse.
El Pollo había sido recluido en el penal federal del Altiplano, en Almoloya de Juárez, Estado de México. El Chapo pretendía rescatarlo con un helicóptero que sobrevolara el patio de la prisión para dejar caer una “burbuja de acero” para que El Pollo subiera y escapara del lugar.
La “burbuja de acero” serviría para resguardar a El Pollo de posibles disparos de los custodios. Detalló que el plan fue ideado por él y Joaquín Guzmán; sin embargo, nunca se llevó a cabo, debido a que Arturo fue asesinado dentro del penal, el 31 de diciembre de 2004.
Otra declaración de El Vicentillo fue que el polémico escolta personal del entonces presidente Vicente Fox estaba en la nómina del Cártel de Sinaloa. Marco Antonio de León Adams fue jefe de seguridad del exmandatario prácticamente toda su administración, hasta abril de 2006, meses antes de terminar el sexenio.
Fue entonces que De León Adams “desapareció”, pese a que tenía una buena relación con el presidente, su esposa y primera dama, Marta Sahagún, así como con el hijo de ella, Manuel Bribiesca.
En ese tiempo mucho se especuló de las razones de su salida, hasta hoy, que sale a relucir una posible razón por la que Marco Antonio fue excluido del círculo cercano del entonces presidente.De acuerdo con El Vicentillo, De León Adams “era amigo de mi papá” y estaba dentro de la nómina del Cártel de Sinaloa. Detalló que el exescolta ayudó a El Chapo a evadir a quienes lo perseguían tras fugarse de Puente Grande, semanas después de que Fox tomara posesión.
De acuerdo con declaraciones de El Vicentillo, De León Adams proporcionó información sobre un operativo para ubicar y capturar a Guzmán Loera. Gracias a eso pudieron sacar al capo de Tepic, Nayarit, abordo de un helicóptero, y lo llevaron a Culiacán.
También señaló que una de las reuniones entre Marco Antonio de León Adams y miembros del cártel fue en el restaurante El Lago, en Chapultepec, en la Ciudad de México.
Incluso, relató que el jefe de seguridad de Vicente Fox era apodado El Chicle, por la marca de goma de mascar “Adams”.
El hijo de El Mayo también relató que visitó la residencia oficial de Los Pinos durante el sexenio de Ernesto Zedillo, en 1997. Según cuentó, la visita fue para reunirse con el general Roberto Miranda Sánchez, entonces jefe del Estado Mayor Presidencial, y así pedirle un favor, que consistía en dejar de allanar los negocios de su madre y hermanas.
No obstante, Zambada Niebla no especificó si el general Miranda estaba en la nómina del Cártel de Sinaloa, aunque sí rechazó que Zedillo recibiera dinero de la organización criminal.
Además, señaló que su padre, El Mayo Zambada tenía “en el bolsillo” a Humberto Eduardo Antimo Miranda, oficial mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en el sexenio de Felipe Calderón.
Además, El Vicentillo abordó su extensa colaboración con las autoridades de Estados Unidos, particularmente ofreciendo información sobre El Mayo.
Al respecto, la defensa de Guzmán Loera lo cuestionó, preguntándole por qué no ha sido detenido su padre, si ha dado tanta información de él, a lo que respondió: “Si no ha sido atrapado, no es mi culpa”.
Lo cierto es que, de acuerdo con El Vicentillo, militares y federales no sólo fueron utilizados como informantes de la organización criminal, sino como un “ejército” del Cártel de Sinaloa para hacerle frente a los de Juárez y los Beltrán Leyva.Señaló que entre 2001 y 2008, gastaron más de un millón de dólares mensuales para pagar a soldados, políticos, funcionarios públicos y agentes de la federación, estatales y municipales.
Zambada aseguró que sus actividades criminales de 2004 a 2009 fueron “autorizadas” no sólo por la DEA, sino también por la Oficina Federal de Investigaciones, el FBI, y la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).
Lo que es un dato duro, es que en marzo de 2009 Vicentillo fue detenido por elementos del Ejercito Mexicano en Lomas de Sotelo, y en menos de un año fue extraditado a Estados Unidos.
Testigo clave
Antes del juicio, Vicente Zambada Niebla se declaró culpable de dos delitos de conspiración, importación y distribución de cocaína en Estados Unidos.
Hoy enfrenta una condena de prisión de entre 10 años a cadena perpetua, pero su condena se puede reducir por su colaboración en este caso.
Lo cierto es que habrá que confirmar todo lo dicho por El Vicentillo. Desde que inció este juicio, parte de la estrategia legal del equipo defensor de Guzmán Loera ha sido dar nombres de personajes de alto nivel, de la política y fuerzas de seguridad, que en gran parte de las ocasiones han sido desmentidas.
Ahora habrá que ver qué tanto son realidad las declaraciones de Zambada, quien en este momento lo único que busca es una pena mucho más benévola para él y no pasar el resto de su vida en una cárcel de máxima seguridad en EU.