Mamuts en Santa Lucía
En la base aérea de Santa Lucía, donde la Secretaría de la Defensa Nacional construye el nuevo aeropuerto internacional General Felipe Ángeles, se han localizado restos de osamentas, 12 de mamuts, tres de camello y una de caballo, todos del periodo Pleistoceno, con una antigüedad de unos 12 mil años aC.
Desde que se empezó a excavar en el predio de Santa Lucía para la construcción del nuevo aeropuerto se hizo con cuidado, porque ya se tenían indicios de que podrían aparecer este tipo de restos. Y es que cuando sean han hecho construcciones y excavaciones en la Base Aérea de Santa Lucía, al sureste del municipio de Zumpango, Estado de México, ya se habían encontrado osamentas de la época del Pleistoceno.
Los nuevos restos encontrados son objetos que están siendo preservados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), en apoyo conjunto con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), y este hallazgo no interfiere con la construcción del nuevo aeropuerto.
Estos restos arqueológicos y paleontológicos localizados en el predio se ubican en cuatro diferentes puntos del polígono de Santa Lucía, pues muy cerca de ahí se extendía el lago Xaltocan.
Ese lago tenía un suelo pantanoso y muchos animales al tomar agua se quedaban atorados en el lodo.
Hace unos días visité nuevamente el lugar donde se construye el Aeropuerto de Santa Lucía, ahí pude platicar con el Teniente Coronel José Luis Martínez Beltrán, quien me habló sobre el descubrimiento de estos mamuts.
“Hasta el momento tenemos localizado 12 osamentas de mamut, ésas se encuentran aproximadamente a una profundidad de dos metros, a dos metros y medio. En este caso nos encontramos específicamente en donde se llevará a cabo la construcción de un Pabellón de mandatarios, dentro de la Base Aérea Militar número 1 de Santa Lucía y específicamente en este punto se localizaron tres osamentas de mamut”, me comentó el Teniente Coronel.
Además, me adelantó que estas osamentas serán exhibidas en un museo que se construirá en el edificio terminal. El museo será diseñado en colaboración con el INAH.
En Santa Lucía también platiqué con el Dr. Rubén Manzanilla López, encargado de trabajos de arqueología, quien me comentó que estos hallazgos no son una casualidad, ya que se tenían referencias sobre su presencia. “Ya se tenía el antecedente de que se habían recuperado cuatro osamentas de mamut en los años 70, del siglo pasado, cerca de la Unidad Habitacional de aquí de la Base Aérea. Entonces, esta área la considerábamos como, con muy alta probabilidad de que se encontraran restos de megafauna.
“Pues hemos localizado 12 osamentas de mamut, más o menos de una antigüedad de entre 12 mil y 6 mil años. (Son) esqueletos de camello y uno de caballo del Pleistoceno, que eran unos caballos como de talla muy pequeñita. Y bueno, se hace en coordinación con el personal militar. Estamos haciendo sondeos equidistantes para nosotros calcular dónde puede haber la presencia de restos de megafauna y ya cuando se detecta alguno, nos dan el espacio y las facilidades para la exploración”.
Bibiana Belssaso (BB): La pregunta es ¿cómo llega esta megafauna a este lugar?
Rubén Manzanilla López (RML): Originalmente atravesando el Estrecho de Bering, huyendo de las glaciaciones, pues en las glaciaciones se cubría todo de nieve y no dejaba crecer las hierbas. Cuando pasaba esto, los animales tenían que emigrar hacia donde todavía había pasto. ¿Cuando las glaciaciones se retraían, la humedad permitía que hubiera más comida?, no. Entonces, en este caso, en la última glaciación, la Wisconsin, llegan aquí mamuts, camellos, caballos y leones.
BB: ¿Hace cuánto tiempo pasó esto?
RML: Estamos hablando (de) hace unos 16 mil años. Entonces, el lago de Xaltocan era un atractivo muy fuerte para los animales, porque era una fuente de agua dulce. Desgraciadamente el fondo del lago era muy fangoso y por el peso de los animales se quedaban atorados y ya fallecían, por inanición no (sino porque) no podían escapar. Lo mismo pasaba con los camellos, con los caballos y con los leones. Nosotros lo que hemos encontrado es que en un mismo lugar siempre hay dos o tres individuos de mamut relacionados con osamentas de camello, no sé por qué estén juntos, pero éste y la posición en la que los encontramos es como dispersa, porque tantos siglos y con las fluctuaciones del lago, los huesos se iban dispersando.
Sobre el estado en el que se han encontrado las osamentas, el arqueólogo me dijo que están en buenas condiciones, pero que sí existe un deterioro, “porque el suelo aquí es muy salino y la sal pues ataca todos los restos orgánicos, no; pero podríamos decir que el estado de conservación es como entre bueno y malo; como medio”.
BB: ¿Cuál es el proceso que se realiza con las osamentas?
RML: Conforme se van encontrando los huesos, se van limpiando, se van consolidando así en donde se van encontrando y después se hacen moldes de yeso que nos permite sacarlos sin que se rompan las partes óseas. Haga de cuenta que los envolvemos en yeso. Entonces ahorita estamos depositando todo en una bodega que tenemos, con la idea de que se restauren los que estén en mejor estado de conservación y puedan ser exhibidos en el museo que se destine dentro del aeropuerto, si es que ése es el caso.
Uno de los aspectos que me llamó la atención es que en este lugar se hallaran restos de camellos; el arqueólogo me comentó que “así era la fauna del Pleistoceno, había incluso unos animales que se conocen como perezosos gigantes que aquí no hemos encontrado, pero eran de talla de más de dos metros de altura”.
Estos restos están siendo excavados con mucho cuidado para poderlos preservar. La mayoría de los mamuts se extinguieron a finales de la última glaciación. Aún no se ha encontrado una explicación definitiva de su extinción. La última población de mamuts que sobrevivió fue en la isla Saint Paul, en Alaska, hasta el año 6,000 aC.
Estos restos encontrados en México son parte del inicio de nuestra historia, hallados en un lugar donde se pretende construir parte del futuro de nuestro país.