Un Mundial con restricciones ridículas
El Mundial de Qatar está por empezar. El mundo del futbol se prepara, pero también los distintos países para estar en comunicación con las autoridades del país que va a hospedar el Mundial de futbol.
¿Qué se va a permitir en Qatar, cuyas costumbres árabes son muy distintas y discriminatorias hacia las mujeres y la comunidad LGBT?, ¿en dónde se puede consumir alcohol?, entre muchas otras reglas.
Se estima que el próximo mes de noviembre lleguen más de 1.2 millones de visitantes durante el torneo, lo que supone casi la mitad de la población total de este país, que es de 2.5 millones de personas.
La vida, las costumbres, lo que está permitido o no, es muy distinto al mundo occidental. Es un país que profesa mayormente el islam, pero se define como una nación abierta, donde la práctica de otras religiones no tiene impedimento.
Una las restricciones que será impuesta en esta justa deportiva tiene que ver con la prohibición de ondear la bandera de la comunidad LGBT, principalmente en los estadios.
El mayor general de la policía de Qatar, Abdulaziz Abdullah Al Ansari, indicó que las parejas que pertenecen a esa comunidad serán bienvenidas y aceptadas, sin embargo, en ese país es un delito la exhibición pública de afecto entre estas personas. No se podrán abrazar ni besar en público o serán detenidos.
Por ello, lanzó un llamado para no exhibir la bandera del arcoíris, que representa a esta comunidad, con el argumento de que no se trata de una prohibición, sino que “no puede garantizar el buen comportamiento de la gente y se puede prestar a una provocación”.
Explicó que “si un aficionado ondea esa bandera y él se la quita, no es porque lo quiera o busque insultarlo, sino más bien protegerlo, porque alguien cerca podría agredirlo”. Por ello, indicó que: “no hay necesidad de realmente ondear esa bandera en este momento”.
Para las parejas heterosexuales también hay restricciones. Los gestos públicos de afecto o de intimidad, así como las relaciones sexuales fuera del matrimonio, son ilegales. Así que quien quiera dormir con una pareja con quien no se está legalmente casado, incurrirá en un delito.
También hay conductas castigadas como gritar en la calle o ser grosero con el prójimo, lo que pueden llevarte a multas de tres mil riyales qataríes, lo que equivale a 800 dólares, hasta seis meses de cárcel o ser deportado.
Además, existe una política de “cero tolerancias” por conducir bajo los efectos del alcohol, consumir bebidas alcohólicas o estar en estado de ebriedad en espacios públicos. La edad legal para consumir alcohol en lugares autorizados es de 21 años.
Para el Mundial, las bebidas con alcohol serán autorizadas en zonas previstas al efecto. Para poder tomar alcohol, se podrá hacer sólo en zonas señaladas, esto es desde tomar una copa de vino.
¿Será una fiesta?
En cuanto a las mezquitas no están abiertas al público que no sigue la religión, excepto algunos recorridos por la Mezquita Nacional Mohammed Ibn Abdul Wahhab y la Mezquita de la Ciudad de la Educación.
Sobre estos temas tuve la oportunidad de platicar en febrero pasado con Martha Delgado, subsecretaria de Asuntos Multilaterales y de Derechos Humanos de la Secretaría de Relaciones Exteriores, quien comenta que ya visitó el país y que platicó con los organizadores. Me explicó que definirían alguna relajación sobre esas normas, pero que hasta el momento todavía no lo deciden.
Al abordar el tema de la llegada de mexicanos a la justa mundialista, Martha Delgado explicó que el gobierno qatarí está pensando cómo va a manejar estos temas de prohibición de alcohol y demostrar el afecto en público, sobre todo la seguridad.
Habrá consulados provisionales de México en todos los partidos donde juegue nuestra selección. La funcionaria explica que ella cree que la gran mayoría de las personas que acudan a estos consulados será por robos de carteras o extravíos de pasaportes.
Pero la Cancillería sabe que las leyes en Qatar son muy distintas a las mexicanas y que es muy importante que nuestros connacionales las conozcan y respeten, para evitar cualquier problema serio.
Se estima que más de 80 mil mexicanos asistirán al Mundial. Y no lo dice la funcionaria, lo cuento yo, siempre hay algún mexicano que hace el ridículo durante los mundiales de futbol.
Las restricciones en Qatar para las mujeres son muy estrictas. Se les tiene prohibido realizar ciertas actividades o llevar puesta ropa distinta a la que marcan las reglas.
Los ciudadanos tienen una forma particular de vestir, las mujeres no pueden tener partes del cuerpo al descubierto. Human Rights Watch (HRW) ha criticado el sistema discriminatorio de tutela masculina que se aplica en esta nación, que niega a las mujeres el derecho a tomar decisiones clave sobre sus vidas.
Este sistema discriminatorio también niega a las mujeres la posibilidad de desempeñarse como tutoras principales de sus hijos e hijas, aunque estén divorciadas y tengan la custodia legal. Las restricciones violan lo establecido en la constitución de Qatar y el derecho internacional.
Para las mujeres extranjeras se recomienda cubrir hombros y rodillas en lugares públicos, como museos, hospitales, oficinas de correos y dependencias públicas.
Incluso, en algunos centros comerciales no se puede ir vestida con shorts, minifaldas o blusas sin mangas. Pero se les permite llevar descubierta la cabeza.
Lo que pasa en Qatar se extiende a otros países cercanos, como Irán, que la semana pasada causaron polémica tras prohibir a las mujeres la entrada a un partido de futbol, clasificatorio para el Mundial.
Ya con boleto en mano y formadas para presenciar el encuentro entre Irán y Líbano, dos mil mujeres fueron rechazadas por las autoridades del estadio Imam Reza. Opositores y ONG pidieron a la Federación Internacional de Futbol (FIFA) sancionar a Irán, e incluso impedir su participación en el Mundial de Qatar, debido a esta situación.
Esto ocurre a unos meses de que comience el evento de futbol más importante, que tendrá los reflectores puestos en Qatar en medio de estas limitaciones y prohibiciones a los derechos humanos de la comunidad LGBT y de las mujeres, pese a que la FIFA, a través de su presidente, Gianni Infantino, dijo que “todo mundo verá que todos son bienvenidos, aquí, en Qatar”.
Y serán bienvenidos mientras las parejas no se abracen en público, los miembros de la comunidad LGBT oculten su identidad, las mujeres no usen shorts ni minifaldas, que los que consuman alcohol lo hagan sólo en zonas restringidas y que si no se está legalmente casado con la pareja no podrán tener relaciones sexuales porque en Qatar es un delito.