Los moches de Rojas Cardona
Hace unos días publicamos en esta columna que el llamado “Zar de los Casinos”, Arturo Rojas Cardona, había sufrido un duro golpe con la revocación del permiso que le permitía operar hasta 50 casinos en todo el país.
La Secretaría de Gobernación informó que la acción contra la empresa Entretenimiento de México fue dictada porque no acreditó su operación legal e incumplió con las condiciones del permiso expedido durante la administración del presidente Vicente Fox.
Recibí una carta, la firma Eduardo Campos como abogado de Emex. Dice que la empresa tiene el derecho legal de operar los casinos y afirma que la información que ha dado la Secretaría de Gobernación es poco precisa.
En un primer anexo sostiene que “la razón que da la Segob para la revocación es la presunta existencia —a criterio de la Segob— de un documento municipal que no está debidamente firmado y que avala a nuestro establecimiento de San Juan del Río, Querétaro”.
En el segundo anexo dice que “la Segob confundió algunas fechas de notificación”. Y textualmente dice: “Por favor note que esa notificación oficial está fechada el día 15 de abril, cuando un representante de nuestra empresa la recibió en sus manos. Esto es importante, porque en esa fecha empieza un término legal que la propia Secretaría de Gobernación dicta en su resolución para revocar el permiso”.
En el tercer anexo afirma que la dependencia cuestiona que el secretario de finanzas de Querétaro no esté facultado para otorgar una “anuencia”.
Y en el cuarto punto de la carta dice que, “como documento local que es, cada municipio de México determina de manera independiente y autónoma la forma en que expide esas anuencias”.
Hoy sabemos el porqué de la preocupación de Rojas Cardona, para que sus asuntos se litiguen sólo en ciertos estados y con jueces y magistrados específicos.
Ayer, el periódico El Universal dio a conocer unos audios donde se revela un presunto tráfico de influencias para favorecer al empresario casinero Rojas Cardona, en el que estarían implicados magistrados y jueces federales.
En las conversaciones se escucha al magistrado de circuito del tercer tribunal colegiado en materia civil del estado de Nuevo León, Eduardo Ochoa Torres, y al apoderado legal y encargado de relaciones públicas de Rojas Cardona, gestionar que la gente del empresario contacte a otros jueces federales para “atender” sus casos judiciales.
En uno de los audios se escucha la familiaridad que tienen estos dos hombres y en otro incluso se pactan algunos pagos, ya que se llegó a un acuerdo con otro juez.
Lo decía la semana pasada, Rojas Cardona siempre ha utilizado dinero para mover las cosas en su favor y las que no ha podido solucionar así lo ha hecho con amenazas, mismas que casi siempre cumple. Desde mandar golpear, hasta meter a la cárcel a personas inocentes.
En el 2010, junto con Jorge Fernández Menéndez, publicamos el libro Justicia Inútil, bajo el sello de Taurus, en el que mostrábamos varios casos paradigmáticos donde la justicia no ha funcionado con estricto apego a la ley, como debiera.
En México, muchas veces lo que se necesita para ganar un asunto es dinero e influencias en el ámbito político y judicial. Y Rojas Cardona tiene todo lo necesario para dar la pelea en este nuevo juicio en su contra.
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