El último mes de AMLO
Faltan 28 días para que el Presidente Andrés Manuel López Obrador termine su mandato y, sin duda, serán los de mayor riesgo para el país.
En este tiempo, López Obrador querrá hacer todo lo que queda pendiente y demostrar que cumplió sus promesas y buscará aún ejercer todo el poder.
En el informe presentado el domingo, llama la atención lo que dice sobre México en la actualidad del país, que parece ser otro muy distinto al que vivimos.
El pasado 1 de septiembre, López Obrador destacó los logros realizados por su administración, uno de ellos es el tema de salud, en el que aseguró: “Ya es una realidad en 23 estados el sistema de salud universal y gratuito, conocido como IMSS-Bienestar. No, no es como el de Dinamarca, es mejor”.
La realidad es que no existe un reporte de especialistas a nivel nacional o internacional que avale este pronunciamiento, pero sí existe evidencia del fracaso de su primer intento por llevar salud universal a través del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que fue creado en enero del 2020 en plena pandemia por Covid-19 y que dejó a casi 30 millones de personas sin acceso a servicios de salud a mitad del sexenio.
El Insabi sólo estuvo en funcionamiento tres años, pues en 2023 fue sustituido por el IMSS-Bienestar, que incluyó una Megafarmacia con un costo de 219 millones de pesos para la compra de medicamentos, con la finalidad de acabar con la escasez de éstos y evitar la corrupción, un inmueble de 90 mil metros cuadrados ubicado en el Estado de México.
Desde su inauguración, en diciembre del 2023, la Megafarmacia sólo ha surtido mil 155 solicitudes de medicamentos a nivel nacional, es decir, seis recetas diarias, de acuerdo con los mismos datos del sexto informe de Gobierno.
En el tema de empleo, durante su informe dijo que el país era el segundo con menos desempleo del mundo, hoy la mitad de los mexicanos trabajan en la informalidad y sin seguridad social.
Durante el segundo trimestre del 2024, la población ocupada en México, tanto formal como informal, ascendió a 59.3 millones de personas, lo que representa 805 mil 171 personas más que en el mismo periodo de 2023; sin embargo, durante ese periodo 32.2 millones de personas fueron registradas en la informalidad, es decir, 54.3 por ciento de todas esas personas sobreviven en la informalidad laboral, indicó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En esos meses, los tres estados con las tasas más altas de informalidad laboral fueron Oaxaca con 80.2 por ciento, Guerrero con 77.3 por ciento y Chiapas con 74.8 por ciento, entidades que históricamente siempre han presentado altos rezagos educativos y ahora laborales también.
Mientras que la población desocupada sumó 1.6 millones de personas, lo que representa 2.7 por ciento de la población económicamente activa (PEA), cifra que prácticamente no cambió en comparación con el primer trimestre de 2023, que reportó 2.8 por ciento de la PEA.
El Presidente López Obrador habló de un México con una economía estable, cuando los expertos aseguran que ésta está detenida con alfileres, y más después de los anuncios de la reforma judicial que tiene muy nerviosos a los mercados y a nuestros socios comerciales.
López Obrador habla de un país libre, mientras la organización Human Rights Watch asegura que las reformas propuestas y que, sin duda, pasarán por la mayoría que se tiene en las cámaras legislativas, ponen en riesgo los derechos humanos de los mexicanos.
A poco menos de un mes de que termine el Gobierno de López Obrador, él espera que sus 18 reformas pendientes sean discutidas y aprobadas antes de que termine su sexenio, recordando que su partido (Morena) se convirtió en un superbloque de 257 diputados que, junto con sus aliados del PT y PVEM, tienen una mayoría calificada de 364 legisladores para modificar la Constitución, las veces que se requiera durante tres años.
Entre los pendientes están la reforma judicial, con la que se busca, entre otras cosas, que los jueces, magistrados y ministros sean electos por voto directo.
Pero además ya ha comprometido al próximo gobierno a continuar con sus proyectos insignia. Tendrá que terminar la Refinería de Dos Bocas, que aún le falta mucho para poder realmente refinar petróleo.
También está el Tren Maya, que ha costado varias veces su valor presupuestado y no va a recuperar un peso y, por ejemplo, la aerolínea Mexicana de Aviación también es un proyecto que necesita subsidio.
En este mes, el Presidente López Obrador buscará que todo lo que él quiere se garantice legalmente, esto sin importar el país que le deje a la administración entrante.
A esto hay que agregar la difícil situación binacional que se vive entre México y Estados Unidos, sobre todo por el tema de seguridad. Otro conflicto que le heredará a Sheinbaum.
Claudia Sheinbaum tendrá poco margen de maniobra para poder empezar su gobierno, un presupuesto prácticamente etiquetado en donde poco podrá mover, una reforma al poder judicial que no va a ser fácil transitar, un país con una inseguridad enorme y un México en donde se tienen que cuidar todos estos aspectos para que no haya una crisis económica.
Recordemos, López Obrador recibió un México con ahorros, fideicomisos, el fondo estabilizador entre muchos otros recursos, de eso hoy no queda nada.
El país que tendrá que dirigir Claudia Sheinbaum en exactamente 28 días, no será nada fácil y habrá que ver qué tan complicados son estos días, y si eso hará que el reto para la nueva Presidenta sea aún mayor.
