“En algunos casos, grupos del narco patrocinan a los artistas”
Gobiernos locales como los de Quintana Roo y Tamaulipas, ante la violencia insostenible, piden que se dejen de pasar y escuchar “narcorridos” o los “corridos tumbados”, porque hacen alusión e incluso apología del narcotráfico.
Pero el fenómeno es mucho más extendido y las propias autoridades, en muchas ocasiones, los publicitan. El grupo Firme canta narcocorridos e incluso tiene uno muy popular dedicado a Ovidio Guzmán, y, sin embargo, fue invitado a tocar en el Zócalo e, incluso, el Presidente López Obrador ha pasado temas suyos en la mañanera.
El fenómeno es mucho más antiguo, más extendido, tiene muchas facetas. Por ello, platicamos con el periodista Edmundo Pérez, autor del libro Que me entierren con narcocorridos, publicado por editorial Grijalbo.
EDMUNDO PÉREZ (EP): Originalmente las bandas regionales se dan en el norte del país, surgieron hace casi 80 años, sobre todo en Sinaloa, la cuna de las bandas gruperas. Tenemos, por ejemplo, El Recodo, que empezó cantando canciones festivas, como “El sinaloense”, temas alusivos a festividades. Los narcocorridos, en los que le cantan al narcotráfico, son recientes, surgen en la década de los 70, porque el corrido se originó con la época de la Revolución.
BB: En los 70 Los Tigres del Norte cantaban a Amado Carillo, y Los Tucanes de Tijuana a los Arellano Félix.
EP: Sí, de hecho, ellos hacen una canción que se llama “El jefe de jefes”, alusiva a estos personajes. A partir de ahí, digamos, empiezan a mencionar a ciertos personajes. Le ponen nombre, por ejemplo, a Amado Carillo. El narcocorrido da una apología de la violencia y del tráfico de droga más explícito, y ya en estas últimas décadas son las que trasciende ese tipo de letras más violentas.
BB: ¿Cómo surge la relación de algunos de estos grupos con narcos?
EP: Hay dos vertientes: una, es que cuando empiezan a tener popularidad o se hacen famosos, muchos capos tienden a contratarlos para amenizar sus fiestas. Hay otra clase de grupos que son creados revestidos por los capos, ellos los patrocinan, les compran los instrumentos, su vestuario, les hacen alguna producción discográfica. Ahí es cuando hay cierto problema, porque cuando estos artistas quieren hacer algo de manera independiente, es cuando viene alguna venganza contra ellos, porque pertenecen a ellos.
BB: Tienes muchas historias en tu libro, una de ella de Joan Sebastian.
EP: Joan Sebastian era constantemente contratado en lugares de mucho lujo, pero poca gente, porque así son los narcotraficantes, hacen fiestas, algunas no muy ostentosas, pero llevan al artista del momento o al que pueden pagar. En el caso de Joan hubo un escándalo porque su rancho en Juliantla servía para guardar ciertos enervantes. Llegaban al aeropuerto de Cuernavaca cargamentos en avionetas y de los trasladaban a Guerrero, donde está el rancho, y ahí los guardaban, eso es lo que se difundió según un informe de la Secretaría de la Defensa.
BB: ¿Cómo se cuidan los artistas para ver adónde van a ser contratados?
EP: Realmente es muy difícil, y lo han comentado muchos de estos artistas, que es muy difícil que ellos se nieguen porque, de alguna manera, a la hora que los contratan no piden un antecedente de quién es quien los contrata. Siempre las contrataciones las hace un tercero. En el caso de Juan Gabriel, él actuó en una fiesta de Pablo Escobar, en Colombia, que él sabía perfectamente a quién iban a cantar. El problema es que Juan Gabriel quiso hacer una demostración de afecto hacia Escobar, quiso darle un beso, entonces después la gente de Pablo le dijo: “Termine su show y váyase, porque el patrón no está muy a gusto con que usted le haya querido dar un beso”. Roberto Gómez Bolaños y El Chavo del 8 también estuvieron en fiestas de Pablo Escobar, aunque Chespirito siempre lo negó, hay evidencias con fotografías y testimonios de María Antonieta de las Nieves, de Carlos Villagrán, de que sí estuvieron, entonces hay quienes sí saben exactamente adónde van a ir, y hay otros que no saben y que llegan a los lugares y es cuando se dan cuenta. En cierta ocasión contrataron al grupo de Burbujas, estas botargas tan famosas de la televisión, para una fiesta infantil, pero no les dijeron exactamente con quién, solamente los citaron en una glorieta en Cuernavaca y ahí donde llegaron ellos con su camioneta, llegaron otras camionetas que los condujeron a la fiesta y se dieron cuenta de que había gente armada y es cuando ellos descubren que van a la casa de un narcotraficante.
BB: Muchos han perdido la vida, ahí está el caso de Valentín Elizalde.
EP: Se investigó en aquel momento por la Sedena y por la Procuraduría, que supuestamente Valentín Elizalde cantaba la canción “A mis enemigos”, de la que se editó un video donde aparecían gentes de El Chapo Guzmán, donde se veían muertos, asesinados, y al final aparecía El Chapo con un arma en las manos, era como un mensaje subliminal que, a través de la música, se mandaba a los del Cártel del Golfo, diciendo que los del Cártel de Sinaloa eran superiores. En el caso de Sergio Gómez, de K-Paz de la Sierra, hay varias versiones, una, y dicha por uno de sus compañeros de la orquesta, es que había recibido amenazas para no presentarse a cantar en Morelia. También se decía que no quería pagar derecho de piso, pese a estas advertencias, Sergio y K-Paz de la Sierra actuaron y, después del concierto, lo secuestraron junto con un grupo de personas, a las otras personas las liberaron y a él se lo llevaron y al día siguiente apareció muerto a un lado de la carretera. Otra de las versiones es que pudo haberse metido sentimentalmente con la mujer de algún jefe del narco, y que por eso lo ajusticiaron. Cuando encontraron el cadáver tenía los genitales quemados, podría haber sido una venganza.
BB: ¿Quiénes son los cantantes actuales más famosos de este género?
EP: Peso Pluma y Natanael empezaron en las redes sociales a promover su música y, como tienen muchísimos seguidores, es donde más trascienden, donde más impulso tienen y donde más seguidores escuchan su música y, como además, son temas pegajosos, temas rítmicos, creo que eso les ayuda mucho a este nuevo género de música.
Otras historias en la lupa
Kombo Kolombia . El grupo de Monterrey, que cantaba vallenato, fue contratado por un grupo delincuencial para una fiesta privada. Cantaron poco más de dos horas al parecer les pidieron que se quedaran más tiempo; ellos no quisieron, porque tenían otros compromisos, y resulta que a estos músicos, 14 integrantes del grupo, los asesinaron junto con tres integrantes de su staff. Un total de 17 personas fueron ultimados en un rancho donde se habían presentado.
Jenny Rivera. En el caso de la cantante hay muchas hipótesis de qué pudo haber sido saboteado su avión. Ella murió en Nuevo León, en 2012. Después de varios años de su fallecimiento, quien era uno de sus apoderados o representantes escribió un libro donde menciona que a Jenny le cobraban derecho de piso. Ella no quería dar dinero y este señor tenía que pagar a escondidas. Cuando Jenny se entera, le pide a este señor que no pague, que no va a dar dinero a narcotraficantes, y este señor seguía pagando a escondidas. Se habla también de que Rivera estuvo en una fiesta con Edgar Valdez Villarreal, La Barbie. Él la habría golpeado porque quería cierto favor sexual y ella se negó; cuando se va Jenny, ella lo amenaza con que lo va a denunciar; ésa es la versión que se da y después se sabe que Jenny fallece al caer la avioneta en que viajaba, que supuestamente pudo haber sido manipulada. Éstas son las últimas versiones que han surgido sobre la muerte de la intérprete.