Me gusta pasar tiempo con la gente o sitios que voy a fotografiar: Anuar Patjane
Son millones los paisajes, personas y momentos únicos que hay en México, que teniendo tanto y algunos en sitios tan remotos, puede ser prácticamente imposible conocerlos todos. Una idea increíble ha sido el proyecto #MexicoEnUnaFoto, de Marca México, dirigido por Carla Sánchez Armas.
Miles de imágenes de fotógrafos profesionales y amateurs fueron enviadas desde los sitios más distintos y bellos del país.
Tan sólo en el primer trimestre de este año más de 10 mil personas eligieron México para vacacionar, una cifra histórica, y cuando se ve este acervo fotográfico del paisaje que tenemos, es claro el porqué de la afluencia.
Fotógrafos como Anuar Patjane, Cristan Vizl, Ana Hop, Yvonne Venegas, Ernesto Lehn y Santiago Arau están entre los autores de las más de cincuenta imágenes que integran la muestra que se exhibirá hasta inicios de septiembre en la Galería Abierta Gandhi de las rejas de Chapultepec.
Algunas de las imágenes se exhibieron durante el Mundial de Rusia como parte de las actividades del pabellón cultural Una probadita de México. Otras miles de imágenes están en Instagram y ustedes, si quieren, pueden subir las fotos que tomen con el hashtag#MexicoEnUnaFoto.
Platiqué con el representante de los fotógrafos de México en una foto, Anuar Patjane, sobre este proyecto y la exposición.
BB: Estuve en la inauguración de esta gran exposición en las rejas de Chapultepec, que se hizo a través de un concurso para que la gente enviara las imágenes de un México que muy pocos tienen la oportunidad de ver. ¿Cómo te enteras del concurso? ¿Eres el representante de los fotógrafos? Platícame.
ANUAR: Me entero del concurso a través de la agencia Oro Negro, que Marca País contactó para armar el proyecto. Ellos fueron los que buscaron a un grupo de fotógrafos profesionales, creo que fuimos 10, pero ésos iban a iniciar con la primera aportación de imágenes y ya de ahí se daría la promoción al evento, “México en una foto”, y se intentaría jalar a fotógrafos amateurs para que mandaran su material, prácticamente así fue como me enteré. Es una especie de evento que intenta crear un acervo de imágenes bonitas de México, y a mí por eso me gustó mucho la iniciativa de crear imágenes positivas de México y ya de ahí se seleccionaron algunas para la exposición de Rusia durante el Mundial y otras imágenes se eligieron para la exposición en las rejas.
BB: Cuando mandas tu imagen la meten a concursar y gana premios internacionales.
ANUAR: Generé la foto directamente para este proyecto y de hecho no la había publicado hasta que salió “México en una Foto” y empezaron a usar cinco de mis fotografías que hice especialmente para el proyecto y ganan el concurso, porque Marca País la mete a concursar en Cannes y es ahí donde ganó la medalla de bronce.
BB: ¿Cuántas imágenes están expuestas en las rejas de Chapultepec y cuántas se han recibido?
ANUAR: son 57 imágenes impresas, pero el total que mandaron no recuerdo si andaba en 12 mil o más.
BB: Hay una página de Instagram a la que todo el mundo puede subir las imágenes de México.
ANUAR: Exactamente, usaron el hashtag “#MéxicoEnUnaFoto”, entonces cualquiera podía subir una foto y se jalaba para usarlas en redes y todo ese tipo de cosas…
BB: ¿La foto del premio cómo la tomas?
ANUAR: Esta imagen la hice en Cabo Pulmo, en Baja California Sur; es uno de mis lugares favoritos para bucear, es un lugar único que está muy, muy cuidado, se ha recuperado mucho la vida. Se ha vuelto más o menos predecible saber dónde van a estar estos peces que se llaman jureles. Vas con un buen capitán que sepa dónde están, te avientas al agua y en cuanto un buzo empieza a nadar cerca de donde están todos los peces, éstos se suelen abrir, o sea, para mí no fue muy complicado porque ya sé más o menos cómo se comportan esos peces.
Fue nada más cuestión de estar ahí, ser paciente y esperar a que los peces empezaran a moverse. Y el buzo es muy experimentado, no es guardaparque, pero tiene entrenamiento como vigilante del parque, todos los guías del parque necesitan entrenamiento para estar buceando ahí y llevar gente, él es uno de esos buzos que tienen el entrenamiento y se desenvuelve muy bien entre peces, por eso está tan tranquilo y esa tranquilidad se transmite en la foto.
BB: Platícame, ¿para ti cuáles han sido los lugares más mágicos de México para hacer fotos?
ANUAR: Mira, Revillagigedo para ballenas y delfines es la meca, es un espectáculo único. Como Revilla tenemos dos o tres lugares más, por ejemplo, Cabo Pulmo y algunos puntos en el Mar de Cortés que poco a poco se han ido recuperando y podrían recuperarse más. Más al norte está el problema de la pesca ilegal con la totoaba y la vaquita marina y el futuro no pinta muy bien, ahí tenemos que apretar un poco para regular más. También te puedes ir hacia Xcalak, pegadito a Belice, y es un lugar que también está muy cuidado, muy bonito arrecife; por todos lados hay cosas qué ver. En Veracruz, en las plataformas de bombeo de Pemex que están medio abandonadas, ahí también hay lugares llenos de vida.
BB: ¿Cuál fue tu foto favorita del proyecto?
ANUAR: Mira, había una de los coras que me fascinó, no recuerdo quién la tomó, pero es una de las tomas más bonitas que vi en la exposición; también hay una de un águila real mexicana que es una belleza de foto.
BB: ¿Qué tan difícil es hacer un acervo fotográfico así?
ANUAR: A mí me sorprendió lo bien que organizaron el evento para convocar a tanta gente; es espectacular juntar tantas imágenes en un evento así, no está nada fácil, 12 mil y tantas imágenes fue muy buena respuesta. Están pensando hacer un libro, ojalá y se haga, para incluir más obras, porque es muy limitado lo que puedes exhibir en realidad; quizá en un libro se le pueda dar mucho más difusión a lo que se envió y si el acervo está tan bueno, pues vale la pena hacerlo.
BB: Yo pienso que ha sido una gran idea porque es una manera de mostrar México hacia afuera. Mucha gente no sabe que existen siquiera estos lugares tan maravillosos.
ANUAR: Claro, claro. Por ejemplo, esa toma de los coras, trabajos fotográficos de los coras hay muy pocos, entonces, así como ese tipo, hay muchas cosas que están por ahí enterradas que vale la pena darles más difusión.
BB: Bueno, el fotógrafo de los coras, Alex Fernández, platica que las imágenes que hace casi siempre son robadas. Dice que para tomar la de los coras se escondió. ¿Los fotógrafos se tienen que robar el momento?
ANUAR: Yo no lo suelo hacer, ya depende de la ética de cada quien, a mí me gusta pasar mucho tiempo con la gente que voy a fotografiar, en los lugares que voy a fotografiar, para no tener que robar la imagen en sí. Yo lo veo más como una especie de proceso de comunicación entre dos partes. Si te involucras de fondo con la gente que estás retratando, con el ambiente que estás retratando siento que tus tomas van a ser mucho más eficientes, van a transmitir mucho más. No sé cómo funciona a nivel mental, pero la imagen que requirió un trabajo de tiempo, de fondo, transmite más que una imagen que suele ser robada. Ése es mi punto de vista, pero hay quien te diría que no, que el momento decisivo se roba, se toma y no hay que pedir permiso, es una forma de ver, pueden ser varios, pero yo no soy tanto de esa filosofía, a mí me gusta más trabajar mis imágenes.
BB: De las imágenes que has hecho, ¿cuál es la que más trabajo te ha costado?
ANUAR: Las fotografías que estoy haciendo de cuevas; me ha costado mucho trabajo por el nivel técnico que requieren, no son tan espectaculares porque es muy difícil mostrar lo espectacular que puede ser una cueva, son imágenes muy complejas por la poca luz que hay y todo lo tienes que hacer con la artificial, en un medio en que es complicado bucear.
BB: Pero son imágenes que si tú no captas con la lente es prácticamente imposible que cualquier persona las pueda ver.
ANUAR: Exactamente, ahí está el valor de este tipo de tomas, que, aunque no son tan claras y aunque no te muestran tanto los detalles, son contextos que pocas veces puedes ver y el valor de la imagen es más como un documento que como una cuestión artística, estás mostrando, estás documentando un lugar poco visitado.
