Ni su familia votó por ellos
Si algún día amanecen con la autoestima por el suelo y sienten que nadie los quiere, piensen que siempre hay alguien que está peor.
Imagínense ser candidato a una alcaldía y que ni tu esposa, hijos o amigos con los que acudes a la casilla, voten por ti.
Resulta que el candidato por el Partido Social Demócrata (PSD) a la alcaldía de Zacualpan de Amilpas, en Morelos, Manuel González Campos, llegó el domingo a la casilla que le correspondía, muy contento e ilusionado y acompañado de toda su familia. Al concluir la jornada electoral, y con ella el conteo de los sufragios, se dio cuenta que sólo había obtenido ¡un voto!… que seguramente fue el de él.
¿Se imagina la plática que seguramente tuvo con sus familiares después de conocer los resultados?
Candidato: “Mi amor, por qué no votaste por mí”.
Esposa: “Sí voté por ti, pero seguro hubo fraude”.
Candidato: “No es vedad, lo que pasó fue que no quisieron votar por mí”.
Lo peor de todo, es que este candidato no fue el único que tuvo solo un voto. En la elección para la presidencia municipal de Mártires de Tacubaya, Oaxaca, dos aspirantes obtuvieron un sólo voto: Saraí García Vázquez, abanderada del Partido Unidad Popular (finalmente sumó dos sufragios) y Lucy Olmedo de la Cruz, del PSD.
En el municipio de Cuncunul, en Yucatán, dos candidatas también obtuvieron un voto; se trata de Leydi Margeli Chan Dzul, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), y Lilia Rubí Tamayo Poot, candidata del Partido Nueva Alianza (Panal).
Los que no ganaron podrían encontrar muchas excusas: que fue por el efecto tan grande que tuvo López Obrador en esta elección, fallas en su campaña, el voto antisistema…, pero que solamente obtengan un voto, que además es muy probable que sea del mismo candidato o candidata, es de pena ajena. Que ni tus padres, pareja o hijos voten por ti, es que algo está muy mal.
Otra que no ganó en su tierra, pero que con los votos en otros municipios logró una senaduría y a quien el domingo pasado le entregaron la constancia de mayoría como Senadora de la República, es Nestora Salgado.
Nestora era la coordinadora de la Policía Comunitaria de Olinalá, y es acusada de haber participado en al menos 48 secuestros, entre ellos los de cuatro adolescentes de 11, 13 y dos de 17 años; y además estuvo detenida por esos hechos en el penal de alta seguridad de Tepic, Nayarit.
Nestora Salgado retuvo a María, porque su familia se negó a “cooperar” para comprar armas a la policía. Durante su retención, a la joven la bañaban a las cinco de la mañana con una cubeta de agua fría y después la sacaban al campo a trabajar.
Cuando no laboraba, la mantenían encerrada dentro de una construcción que fue adaptada como cárcel, a la que llamaban El Paraíso, en el municipio aledaño de Ayutla de los Libres.
Esas historias son conocidas por la gente de Olinalá, Guerrero, la tierra de Nestora, en donde no ganó la votación.
¡Nestora no ganó en Olinalá!
Hay otros casos en donde sí ganaron los candidatos y además hicieron el ridículo.
Está el caso de la senadora por Baja California, Alejandra del Carmen León Gastélum, de 41 años, quien fue postulada por Morena.
Al conocer los resultados que la daban ganadora del escaño legislativo, León Gastélum salió a festejar con una botella de champaña y en plena “fiesta” grabó un video donde se burlaba de sus contrincantes electorales.
Pero además circula en redes sociales un video de ella en una cantina bailando y mostrando sus partes privadas.
Tras el bochornoso video de la champaña en el incidente de la llamada Lady Champaña, la presidenta de Morena, Yeidckol Polevnsky, informó que León Gastélum sería sometida a un proceso de expulsión de la bancada. Por lo pronto, Alejandra León Gastélum ya recibió la constancia de mayoría que la acredita como Senadora Electa por Baja California. Por cierto, Jaime Bonilla, su compañero de fórmula, no se presentó con ella.
También está el singular caso del candidato por la coalición Por México Al Frente a una diputación local por el Distrito 09 en Sinaloa, José Manuel Valenzuela López, mejor conocido como Chenel, quien tras conocer los resultados que le daban la victoria, se vistió de San Martín de Porres para recorrer las calles del municipio de la Angostura.
El controvertido alcalde con licencia había prometido que, si ganaba, se vestiría de santo religioso. Cuando fue cuestionado por qué eligió ese santo, contestó que San Martín de Porres se le apareció en figura (no en persona) en una iglesia de España.
Pero no crea que esta ocurrencia fue espontánea, el tres veces alcalde de Angostura es conocido en esa región por sus extravagancias, como cuando se lanzó al mar, desde un barco, durante un acto oficial conmemorativo al Día de la Marina, o cuando participó en una pelea de box contra Julio César Chávez.
Y así es como tras la jornada electoral del pasado 1 de julio, poco a poco salen a la luz aspectos que reflejan la fiesta democrática que vivió México. Algunos casos nos dan risa, otros de verdad tristeza y preocupación.
Con menos sufragios
La virtual senadora por Morena, Nestora Salgado, asistió a la reunión que los próximos legisladores de ese partido tuvieron con el ganador de la elección presidencial, Andrés Manuel López Obrador, en su casa de transición.
Ayer, tras el encuentro en el inmueble de la colonia Roma, en la Ciudad de México, Salgado aseguró que en su agenda legislativa incluirá el apoyo a pueblos originarios, presos políticos y la defensa de derechos humanos.
Nestora dijo que le dará voz a la gente olficada de la sierra de Guerrero, pues, afirmó, tiene un compromiso con las personas que votaron por ella. Sin embargo, en Olinalá, municipio de donde es originaria la exlíder de las autodefensas, el PRI ganó la presidencia municipal y Morena se fue a la tercera posición.
Aunque la jornada electoral del pasado 1 de julio algunos candidatos registraron menos sufragios de los que esperaban.
Leydi Margeli Chan Dzul, del Partido Verde Ecologista de México; y Lilia Rubí, Tamayo Poot, del Partido Nueva Alianza son un ejemplo.
De acuerdo con el conteo final del Instituto Electoral del Estado (IEE) de Yucatán, el PRI ganó el municipio con 472 sufragios; mientras que la coalición de Acción Nacional y Movimiento Ciudadano registraron 197.
En tercer sitio se ubicó la candidata de Morena, el Partido Encuentro Social y el Partido del Trabajo, con 65 votos. Chan Dzul y Tamayo Poot, sólo tuvieron un voto.