“Todas las democracias deben tener garantizada su división de poderes”
Se presentó este miércoles la candidatura a jueza para la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ante el Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA), para el periodo 2025-2030 de la mexicana Leticia Bonifaz Alfonzo.
Leticia Bonifaz es doctora en derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México, y lleva más de 30 años en el ámbito jurisdiccional y académico. Es especialista en Derechos Humanos.
Ha trabajado gran parte de su vida en el tema de la defensa y protección de los derechos humanos. Esta semana, para La Razón, platicamos con Leticia Bonifaz Alfonzo.
BIBIANA BELSASSO (BB): El día de hoy me da muchísimo gusto saludar a Leticia Bonifaz Alfonzo, ella si sido nominada para integrar la Corte Interamericana de Derechos Humanos para el periodo del 2025 al 2030. ¿Cómo se determina quién llega a la CIDH?
Leticia Bonifaz Alfonzo (LBA): Tres jueces terminan su periodo, entre ellos, el juez mexicano Ferrer, entonces se abre la convocatoria de parte de la OEA, los Estados que están interesados en presentar candidaturas las presentan y hay tres espacios y cinco candidatos, cuatro son hombres, los candidatos son de Perú, Paraguay, Uruguay, que es reelección, Colombia y México.
México, desde que nació la Corte Interamericana, ha tenido presencia de un juez mexicano, estuvo primero el maestro Fix Zamudio, después el doctor García Ramírez, ahorita el juez Ferrer y por eso, quisiéramos mantener la presencia de México, además de que es la primera vez que se presenta la candidatura de mujer, así lo quiso la canciller Alicia Bárcena, entonces aquí estoy, hoy fue la comparecencia ante el Consejo General de la OEA y la votación es en un mes, en Paraguay, el 28 de junio.
BB: Escuché tu discurso y me gustó que busques trabajar con la perspectiva de género entre otros temas.
LBA: Así es, porque creo que mi trayectoria me ha hecho tener siempre ya puestos estos lentes morados, que les decimos, para ver las cosas desde la perspectiva de la mujer, no puedes ver igual ni la migración, ni ningún fenómeno de los que están relacionados con los derechos humanos, los desplazamientos, el derecho al agua, todo ya se ve con perspectiva de género, y eso, creo yo, fortalece mucho la integración de la Corte.
BB: Lo decías tú en tu discurso, la región de América latina es la más desigual del planeta. Se están enfrentando muchos problemas, los indígenas, los migrantes, personas con discapacidad, personas afectadas por el crimen organizado, desplazados, cambio climático.
LBA: Yo jamás vería ningún asunto relacionado con México, me tengo que excusar, pero creo que hay muchos problemas que son regionales, recientemente estuve en una reunión en Colombia y se ve clarísimamente como un tema de migración no lo puede tratar ningún país aislado.
Panamá, por ejemplo, tiene la política de recibirlos en el Darién y entregarlos en la siguiente frontera y sólo es tránsito, pero hay otros países en donde se va complicando mucho más, en donde las razones de los desplazamientos ya no solamente son cuestiones de inseguridad, sino que a veces ya tiene que ver con factores de cambio climático.
Yo comentaba también mi experiencia en la CEDAW, que es la función que ahorita tengo, a mí me eligieron por cuatro años para integrar en Naciones Unidas el Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer y yo ya estoy en mi cuarto año, me ha tocado analizar la situación de las mujeres en Perú, en Bolivia, en Costa Rica, en Honduras, en Nicaragua, en Venezuela y últimamente en Brasil, entonces, las condiciones de cada país varían, pero lo que sí es claro es que sí, la desigualdad es muy grande y siempre vas a tener grupos que van a tener las de perder siempre, por ejemplo, todo lo que es la industria minera extractiva, pues son las poblaciones indígenas que en lo colectivo se ven afectadas.
Hablaba de la interdependencia de los derechos y cómo el ejercicio de un derecho te lleva al ejercicio de otros y la violación de un derecho también te violenta otros. Yo creo que lo interesante va a ser revisar los casos que lleguen a la Corte, cómo fueron planteados por la Comisión Interamericana y cómo se da la ‘garantía de no repetición’, que sería lo más importante.
BB: Te referiste también de un riesgo a periodistas en la región.
LBA: Sí, no se puede dejar de hablar de que están en riesgo tanto los defensores de derechos humanos como los periodistas, porque los defensores de derechos humanos se colocan en una posición de vulnerabilidad también y los periodistas que cubren, sobre todo, estos hechos de defensa de derechos se vuelven también vulnerables, sobre todo, en las naciones que tienen su democracia muy frágil.
BB: ¿Cuáles son los casos que llegan a la Corte Interamericana de Derechos Humanos?
LBA: Cuando ya agotaste todas las opciones que tienes de defensa en tu país, presentas primero el caso a la Comisión, y la Comisión es la que lo presenta luego a la Corte, pero sí necesitas haber agotado todas las instancias jurisdiccionales, todos los medios de defensa que tengas a nivel local tienen que haber estado agotados para irte a una posición internacional, salvo que tengas un caso de urgencia, donde haya habido negación de la justicia y que necesitas una protección inmediata.
BB: Es muy importante tener una Corte Interamericana que pueda brindar garantías.
LBA: Claro, todas las democracias deben tener garantizada su división de poderes y sí, yo no veré jamás casos de México, pero sí la fragilidad de algunos países actualmente de Centroamérica, pero la volatilidad es gravísima en la región, donde un cambio político te lleva a negación de derechos y casi siempre, quienes salen perdiendo primero son las mujeres.
BB: ¿Qué puede aportar Leticia Bonifaz Alonzo, dentro de la Corte Interamericana de Derechos Humanos?
LBA: Viendo hacia atrás yo tenía hoy la posibilidad de reelección ante la CEDAW, pero me propusieron que mejor fuera a la Corte, que presentáramos la candidatura a la Corte y yo lo que pensé fue: “Difícilmente se pueden conjuntar las experiencias que yo he tenido, tanto en el Ejecutivo con políticas públicas cuando estaba en el Gobierno de la Ciudad de México, como revisando muchos casos en el Tribunal Electoral, que estuve cuatro años, más los cuatro que estuve en la Corte en el Área de Derechos Humanos, creo que toda esa experiencia, creo que toda esa experiencia, si la juntas sumada a la cuestión académica pues tiene que desembocar en algo útil y que no sea sólo útil para mí, sino útil para México y útil, sobre todo, ahora ya para América Latina.